martes, 27 de marzo de 2007

Hoja en blanco


Olvidar los malos momentos...

Ya no me acuerdo de nada, si perdí o te amé o si estuve al borde delirio... hoy mi cabeza vuelve a ser una hoja en blanco que está pidiendo a gritos ser escrita nuevamente, pero con los recuerdos más bellos que la vida te puede dar. Son oportunidades que te brinda tu mente, de cambiar el contenido de tus recuerdos, dejar de lado lo negativo y solo pensar en lo que te hizo bien. En mi hoja en blanco estarán: mi familia, que siempre está, aunque a veces me moleste; mis amigos: Nidia, con su eterna compañía y su sentido de la justicia... mujer enorme que se convirtió mi amiga y confidente; Sabrina, mi pequeña que aprender a vivir cada día su vida como mejor le parece y que le da solcitos a mi vida; Carmencita, amiga de las de antes y de las de ahora, la que siempre estuvo y nunca me abandonó y Jhonny, un amigo de estos últimos momentos que con su sabiduría tan simple me ha dado luz para ver las cosas de modo distinto; mis canciones, mis cientos de canciones que escucho cada noche y todo lo que he escrito durante estos meses. Todo merece ir en este papel en blanco que es mi mente.
Afuera dejo las tristezas, el desaliento, la traición, la mentira, aquellos que no reconocen el daño que han hecho, que siguen dañando y siguen mintiéndose a si mismos, los que solo buscan hacerle imposible la vida al resto, todos ellos fuera!... afueras las injusticias de la vida, el deshonor de sentirse engañado y el dolor que mata el alma y que no nos deja crecer.
Dejo espacio en mi mente para mis viajes, mis proyectos y mis sueños... ellos se ganan la mayor parte....
Hoy mi mente se puso en blanco y por un momento solo se acordó de lo lindo que tiene la vida... y dejó en un rincón, muy al rincón todo aquello que no vale la pena vivir.
Fue mi ejercicio diario.... mañana volverá todo nuevamente a ser lo que era entonces, pero espero que cada cosa tenga la fuerza que corresponde y que pueda vivir con la tranquilidad que todo este tiempo he necesitado. Queda mucho por vivir, queda mucho por hacer... hay toda una vida por delante y muchas vidas por detrás.... que todo lo que he puesto en mi mente en blanco, me de la fuerza para seguir...

Trato de pegarle un borrón
a todo lo que en su tiempo me robó una sonrisa.
Quiero recuperar el ritmo
y ya no acelerarme con estúpidas prisas.
No hay un mal que dure cien años,
ni hay idiota que lo soporte.

Salgo caminando a la calle y me tomo
un taxi con destino a lo incierto.
Dejo que la vida sorprenda
a ese trozo de mi
que todavía no ha muerto.
Le faltaré el respeto al destino,
Le sacaré la lengua al pasado.
No tengo siete vidas como un gato,
y es hora de que me de cuenta.

Que no estoy solo
que hay alguien esperando por mí en cualquier sitio,
con cosas nuevas para ofrecer
con mil locuras,
dispuestas todas a realizar lo irrealizable;
que tengo mucha vida por delante.
Que no estoy solo...
de "No estoy solo" de Ricardo Arjona

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