¿Y por qué lo hiciste?

, première mise en ligne par sea ghost.

Y tomé una decisión... y esperé el mejor de los acompañamientos.


Hoy recibo llamados telefónicos que me dicen: qué me hiciste? Por qué me hiciste ésto?


Y yo no se que responder, tantos días repitiendo unay otra vez los motivos por los cuáles dejaba la escuela, el por qué necesitaba disponer de más tiempo para mi, tantas palabras y pocos oídos dispuestos a escuchar.


Tomé esta decisión porque mi cuerpo lo pedía. Levantarme de madrugada, acostarme después de las dos de la mañana... han menguado mis fuerzas y han entorpecido mis capacidades. No tengo vida social, no es que la haya tenido alguna vez, pero ni tiempo a salir con mis compañeros o mi familia.


Tomé esta decisión porque en casa se necesita mi presencia, más que nunca. Aunque no fuera para hacer las tareas cotidianas si no para acompañar, o para charlar, o para compartir un momento frente al Tv. Momentos que hasta esta decisión jamás tuve.


Tomé esta decisión porque es la mejor forma que tengo de seguir creciendo. No estancarme en la rutina. No maniatarme en el stress de la tarea cotidiana. No maltratarme ni que me maltraten. Ellos son los destinatarios de mis conocimientos, pero yo soy el destinatario de sus atropellos.


Tomé esta decisión porque era la Hora. Ni un minuto más ni un minuto menos. Era el momento justo para no arrepentirme y para seguir mirando la vida con otras expectativas.


Tomé esta decisión porque me impuse interesarme antes que nada en mi, pensar en mi antes que en los demás, trabajar por mi, cuidarme a mi.


Tomé esta decisión porque Hoy realmente siento que mi camino es otro y no ese.



Tomé esta decisión y se que tendrán la oportunidad de conocer otros profesionales iguales o mejores que yo. Que les brindarán otras oportunidades a mis alumnos, que les abrirán la mente de otra forma. No soy imprescindible, tampoco irreemplazable.


Tomé esta decisión y se que te estoy ocasionando más trabajo, se que las personas que quieren el puesto no son de lo mejor, se que es un gran problema el que te creo, pero lo pensé mucho y ya no es un problema mío. Desde el momento en que decidí y comuniqué mi decisión, es otra mi vida, otro el camino que tengo que seguir.


Qué te hice? Nada a vos. Trato de mejorar mi vida.


¿Por qué te lo hice? En realidad, no te lo hago a vos, no se lo hago a nadie. Lo necesito y tengo que priorizar mis decisiones y mis opciones.