Tengo una barca en la que deseo surcar cielos inmensos, mares profundos y nunca mirar hacia atrás.
En lo oscuro de un día nublado he pensado en regresar, sujetarme a la orilla para no poder zarpar.
En el medio de la oscuridad un temor ensombrece mi alma, es que tengo miedo de volver a embarcar y recorrer tanto mar, tantos miedos, tantos dramas y volver a recordar.
Esta barca va surcando toda la inmensidad, trae gente, trae sueños y mi amada libertad.
Ella surge plena en la inmensa oscuridad, sabe que su capitana es débil y la tiene que guiar.
Barca de la vida, que es el instrumento que los sueños tienen para convetirse en luz, para resplancecer y seguir buscando aquello que los haga realidad.
Una estrella en el camino es su guía y conexión. Más allá del horizonte tendrá que estacionar. Es que la vida me espera y en algún punto del camino poderme entregar aquello que tanto en mi vida he deseado concretar.
Es mi espírtu el que guía y se vuelve el timón.
Barca llena de anhelos esperados y de sueños sin concresión, vamos juntas navegando sin saber si hay un fin... sobre las espaldas cargo el miedo a la frustración, el miedo a la desilusión.
No debo mirar atrás ni permitirme siquiera desconfiar... debo seguir... quién sigue, siempre la consigue. ¿Cierto?
3 comentarios:
que hermoso post que me hace recuerdo que debo salir de mis momentos dificiles ya que ando un poco tristona pero mensajes como los tuyos me dan tranquilidad y paz, gracias Clau
hola yo quiera tener una barca cerca del mar para poder tener unos minutos para huir de mi mundo y de mis pensamientos
y hermoso post
saludos
Yo tengo una cabeza llena de sueño y duermo.
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