La vida va pasando a gran velocidad, no tengo tiempo a mirar que es lo que puedo esperar y tan pronto se me van los recuerdos, las voces familiares, las vivencias, los rostros amigos, lo que tanto he vivido, que debo aferrarlos a mi vida como puedo.... El tiempo es tirano.
Qué es lo que me espera más allá? Seguiré andando eternamente o llegaré a algún lugar? No se ni que esperar. No me da tiempo a pensar...
Pero quisiera llegar a encontrar mi tan amada felicidad, llegar a establecermi alma en un lugar tranquilo y poder deescansar. Encontrarme con la gente querida y disfrutarlas, sentirlas, amarlas.
Y voy corriendo con el viento, será mi eterna compañía, mi fuerza y mi empuje y con él llegaré, tarde o temprano, pero se que llegaré.
A veces pienso que es cuestión de querer y no de poder. Si yo quiero lo puedo hacer.
Necesitaré parar cada tanto, para recuperarme, para juntar fuerzas, para ver mi camino, para repasar mi plan nuevamente y así volver a retomar la marcha, con nuevos horizontes, con nuevos deseos.
Pero es un duro avanzar que implica reconocerme una vez más, ver dentro mio todo lo que puedo llevar, despojarme de las cargas, de esos pesos que solo me tiran abajo y me impiden caminar.
Es largo el camino, me pueden llevar muchos años llegarlo a recorrer. No se cuánto puede ser, ni cuánto falta por recorrer, pero cada paso que doy, cada minuto que pasa es uno menos en mi vida, uno más en mi existencia, uno más de aprendizaje, uno más para llegar al destino final. Para algunos será la muertes y para otros la eternidad.
Pd: Gracias a Emma que eligió la imagen y orientó mis ideas...
4 comentarios:
Hay un cuento que escuche una vez hace como tres años cuando cursaba filosofia en la facultad y se trataba sobre los judios, seres que sufrieron masacres en masas con metodos inimaginables. Un día, bajaron de los vagones de un tren e hicieron una gran cola que los llevaba hasta una habitación de gas, donde los esperaba el fin. Los chicos no estaban enterados de tal situción pero los adultos si, entonces lloraban y sufrian por lo que se venia a solo unos pocos metros de distancia... entre todos ellos, uno saco un acordeon y comenzo a tocar, a cantar, y a reir, algunos lo acompañaron... el sabia que le quedaban pocos metros de distancia para el fin pero decidio recorrerlos riendo y cantando, mientras que otros lloraban. Creo que en la vida, también es de alguna manera así todos tenemos determinados metros delante de nosotros, (por suerte no sabemos cuantos) y nosotros decidimos en gran parte si recorrerlos llorando o riendo. Buena Vida.
pd: Gracias por la publicidad jaja La foto me encanta pero no voy a decir todo lo que me inspira jaja
Muy buena la metáfora que elegiste para representar nuestro paso por la vida.
Me sigues sorprendiendo gratamente a través de tus sabias palabras que inevitablemente llevan a la reflexión...
=)
Saludos y gracias por la visita, tienes razon cada dia nuevo nos da la oportunidad de volver a empezar.
cuidate
si como esta pasando de rapida la vida que no nos detenemos a disfrutar de aquellos momentos tan bellos
saludos
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