lunes, 13 de julio de 2009

Esta escrito

Soy un antes y un después de ese abismo de amor, que me partió en dos: la que siempre esperó y se conformó y la que vive el mejor día que Dios le dio.
En un oscuro rincón, sin fuerza y sin color elegí dejar atrás esa parte de mi ser que ya no volverá más.
Hay sueños que son de todos, pero no son para todos. Hay vidas que ni esfuerzo necesitan y otras que de a paso se construyen. Es que resultó sano reconocer que no todo lo que quise hacer pude concretar, pero que hay tanto y muchos más que me queda por hacer.
Es que mi vida no necesariamente será como la de los demás y que eso no está mal. Que hay sueños que son parte mía y que siempre estarán, pero no significa que los pueda concretar, simplemente los tengo que guardar y como un tesoro los tengo que resguardar.
Le digo al sentimiento de pérdida y fracaso que alguna vez me acunó, que ni el dolor de la herida me hacen perder la razón, que aunque llore a mares un sueño que se frustró, tengo una esperanza plantada en un pequeño rincón, que crece y crece sin límites al ritmo de mi respiración.
Soy un antes y un después... y aunque recorra otros rumbos y siga buscando y soñando, acepto que no siempre lo que quise fue hecho para mi, simplemente equivoqué el destino y volvi a construir puentes para cruzar abismos y volver a revivir.
Está escrito y ésto no es algo que el viento se llevó, queda guardado en un rincón del alma para volver a recordar y no olvidarse de aquello que se siente en una noche de soledad.

viernes, 10 de julio de 2009

Aprender a salir del fracaso


pensar
Cargado originalmente por ArBo_HaCkEr
No puedo dejar de sentir frustración cuando lo que he planeado por mucho tiempo no se cumple. Pongo expectativas, pongo ganas, pongo deseos, pongo fuerzas. Generalmente, en el 90 % de las situaciones todo se da como quiero, pero ese 10 % restante me desubica, me saca de mis casillas y me tiene pensando a toda hora que tendría que haber hecho para que todo resultara bien.
Soy un tanto mazoquista, un tanto torturadora conmigo misma, no acepto que las situaciones salgan al reves de lo planificado, me cuesta aceptar que no todo es como quiero o planifiqué. Este es un ejercicio que debo hacer parte de mi vida: aprender a aceptar y desde el fracaso, actuar y no pensar tanto y no sabotearme tanto. Son solo palabras que hoy se cruzan por mi mente. Si es por ejercitar mi mente, la mía ya está en las Olimpiadas... ja